Ciudad de México, 8 de diciembre de 2025.— El Senador de la República Luis Alfonso Silva Romo calificó como un paso histórico para la soberanía nacional y la justicia social la aprobación de la nueva Ley General de Aguas, instrumento jurídico que armoniza el derecho al vital líquido con los principios humanistas de la Cuarta Transformación.
Desde la Cámara Alta, Silva Romo subrayó que esta legislación responde a una demanda constante de las comunidades, expresada en múltiples espacios de escucha: poner orden en la gestión del agua y garantizar que su uso se administre bajo criterios de equidad.
“Con esta ley estamos asegurando que el agua sea tratada como lo que es: un derecho humano fundamental y un bien de la Nación, no una mercancía sujeta a la especulación”, puntualizó el senador.
El legislador explicó que la reforma generará beneficios tangibles que impactarán positivamente en el desarrollo de la nación, incluyendo a Oaxaca. Entre ellos, destacó que la prioridad legal será ahora el consumo humano; se garantiza el abasto para uso personal, protegiendo a las familias en épocas de sequía. Asimismo, se crea el Registro Nacional del Agua, una plataforma pública que terminará con la opacidad, permitiendo conocer quién posee concesiones y cómo se utilizan.
Añadió que la ley prohíbe la transmisión de derechos de agua entre particulares, es decir, el llamado “mercado negro” de títulos, devolviendo al Estado la rectoría para reasignar el recurso donde más se necesita. Además, establece candados más estrictos y sanciones severas para quienes contaminen fuentes de agua, alineándose con la agenda de sustentabilidad que impulsa el Gobierno Federal.
“Estamos construyendo un marco legal que mira hacia el futuro, asegurando agua limpia y suficiente para las próximas generaciones y cerrando la puerta a los privilegios del pasado”, concluyó Silva Romo.
