Entre la vida y la muerte: La otra víctima del operativo policial

La tragedia en Santa Lucía del Camino, Oaxaca, que cobró la vida de un joven universitario durante un operativo policial, ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad y el uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades. Sin embargo, hay otra víctima que se encuentra luchando por su vida y que ha sido pasado por alto en la discusión pública: el policía vial que fue brutalmente atropellado durante el operativo.

La situación del policía es crítica, y su familia y seres queridos están sufriendo en silencio, esperando un milagro para que pueda recuperarse. Mientras tanto, el gobierno Estatal, Municipal sociedad y los medios de comunicación se centran en la tragedia del joven universitario, olvidando que la violencia no discrimina y que hay otras víctimas que también merecen atención y apoyo.

Es importante recordar que la policía tiene la responsabilidad de mantener el orden y la seguridad en la sociedad, y que sus indicaciones deben ser respetadas. La desobediencia y la resistencia a las órdenes de los agentes pueden haber contribuido a la escalada de la situación, que finalmente resultó en la pérdida de una vida joven y en la grave lesión del policía vial.

No se trata de justificar el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía, sino de reconocer que la responsabilidad es compartida. Es importante que los universitarios y la sociedad en general aprendan de esta tragedia y comprendan la importancia de respetar las indicaciones policiales y de trabajar juntos para prevenir la violencia y la inseguridad.

Además, es fundamental que las autoridades tomen medidas para garantizar que los agentes reciban la capacitación adecuada para manejar situaciones de este tipo y que se investiguen a fondo los hechos para determinar responsabilidades y evitar que se repitan tragedias como esta. La familia del policía vial y la sociedad en general esperan justicia y apoyo en este momento difícil.