Opinión de Cipriano Miraflores

Ser indio
Por Cipriano Miraflores

Ser indio, indigena, originario, natural, naco, oaxaco, oaxaquita, yope en México es a consecuencia de la colonialidad del poder.

Es un fenómeno de dominación, del poder colonial. Esto nos hace estar en las profundidades del poder. Estamos hasta abajo de la estructura social. Esto nos hace ser discriminados, excluidos, ser tratados con desdén, realizar los peores trabajos, la servidumbre recae en millones de mujeres indígenas. El gobierno nos manipula, nos da caridad y asistencia como si fuéramos inválidos, somos motivo del folclor, de lo peor pues.

Si tenemos poder político se acabará esta discriminación.

Si es un fenómeno del poder político, la solución es conquistar ese poder político. La emancipación política de los más de 70 pueblos ancestrales y el pueblo afromexicano rompería con esta colonialidad.

Necesitamos hacer efectivos nuestra libre Determinación, autonomía de gobierno, social, jurídica, económica y cultural. Tener representación en los órganos legislativos sin mediaciones, tener un presupuesto también sin mediaciones, quiero entender que esto se refería doña Claudia Sheinbaun cuando vino a Oaxaca, habló del Cuarto Nivel de Gobierno: el indigena.

La pluralidad de México no se agota en los partidos políticos, tiene que asumir la pluralidad social.

El ascenso en la estructura política y social es colectivo, de ninguna manera individual. El ascenso de un indigena es solo un mérito particular, querer representar a los pueblos no tiene efectos políticos. Por ejemplo, la asunción de Juárez a la presidencia de la República fue perjudicial para los originarios al efectuar los bienes comunales.

Solo colectivamente lograremos la emancipación , esta es la verdad. Que el mixteco Hugo Aguilar llegue a la presidencia de la Suprema Corte de la Nación es solo mérito particular. Desde luego, no aprobamos el medio empleado.

Que el régimen lo usa como un logro de los pueblos es solo manipulación, pero si Hugo contribuye a la emancipación de los pueblos, bienvenido.

Así las cosas, en vía de mientras procure ser rabiosamente feliz.

Desde Los Angeles Iztapalapa para el Mundo

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