Con la exposición fotográfica Rostros silenciados. Mujeres en la disputa por la ciudad, celebramos un acto de visibilización, resistencia y memoria; es más que una muestra visual, es un ejercicio de justicia simbólica y académica que enaltece a aquellas que han alzado la voz en nuestra urbe y otras latitudes, afirmó la secretaria General de la UNAM, Patricia Dolores Dávila Aranda.

En la inauguración expresó que surge del encuentro de tres espacios fundamentales de pensamiento y acción feminista en la Facultad de Arquitectura (FA): un proyecto del Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica (PAPIIT); la red de investigación feminista Mujeres, espacio, territorio; y el Seminario Permanente de Estudios Críticos sobre Espacio Público.
Esta convergencia ha dado lugar a estos espacios que no solo retratan a las mujeres en sus contextos, en su praxis y con sus rostros, sino que reconocen el trabajo de quienes, desde la academia, han tenido el valor y convicción de contar sus historias, destacó en la Galería María Luisa Dehesa de dicha Facultad.
Rostros silenciados incluye imágenes, revela investigaciones, redes de cuidado y transformaciones. Es el resultado del trabajo de arquitectas, urbanistas, paisajistas y geógrafas comprometidas con resignificar el espacio y devolverle su dimensión humana y justa, añadió ante la directora de la FA, Mónica Cejudo Collera.
Al referirse al estreno del cortometraje Arquitectura del saber feminista. La disputa por el espacio académico, Dávila Aranda mencionó que se trata de una pieza clave de esa iniciativa que recoge las voces de aquellas que habitan y resisten en una metrópoli construida a partir de una visión androcéntrica y que, a pesar de eso, siguen abriendo caminos, cuestionando estructuras y defendiendo el derecho al territorio.
Hoy se da rostro a numerosas mujeres; “ustedes las hacen visibles y con ello reafirmamos que el espacio público, la ciudad y la academia también nos pertenecen”, resaltó.
Visibilizar las voces
Mónica Cejudo detalló: Lo que se puede apreciar en la exposición –que permanecerá abierta hasta el 4 de octubre– y el documental es resultado de un proyecto PAPIIT titulado Territorio, espacio habitable y género. Análisis feminista de la planeación y política urbana, ordenamiento territorial y política de vivienda en México, bajo la coordinación de Carla Filipe Narciso, y como corresponsable, Carmen Valverde Valverde, ambas integrantes del Centro de Investigaciones en Arquitectura, Urbanismo y Paisaje de la Facultad.
Ha sido un plan transdisciplinario y feminista por su metodología de trabajo y alcance, y ha relacionado a mujeres e infancias de distintas partes de la Ciudad de México, Mérida y Tijuana, así como de Portugal y España.
La meta es visibilizar las voces de las investigadoras, tesistas y de las que viven la urbe. Reúne 12 tesis concluidas; cada fotografía registra el diálogo que se logró con comunidades diversas, mostrando la realidad de desigualdad y violencia que ellas enfrentan en el espacio urbano, pero también la fuerza de sus propuestas para construir ciudades más justas y sostenibles, puntualizó.
Cejudo Collera enfatizó que para la FA la exposición representa el compromiso y responsabilidad de fortalecer la labor académica a partir de una perspectiva de igualdad sustantiva, articulando investigación, docencia y compromiso social.
Carmen Valverde Valverde, del Centro de Investigaciones en Arquitectura, Urbanismo y paisaje, y corresponsable del proyecto PAPIIT, subrayó:
La exposición es resultado de varios años de trabajo académico e indagación, de labor transdisciplinaria que trasciende a las comunidades y las beneficia, que les da voz para que no permanezcan silenciadas.
Gloria Ramírez Hernández, coordinadora general de la Cátedra UNESCO de Derechos Humanos de la UNAM, resaltó el papel de las Mujeres Organizadas de la FA, quienes han abierto brecha y obtenido grandes logros. Y, en la línea académica, la aplicación de la perspectiva de género y el desarrollo de trabajo teórico; “hacer 12 tesis y 18 investigaciones con perspectiva de género no es sencillo”.
En su oportunidad, Martha Tagle Martínez, consultora en género y derechos humanos, afirmó:
La exposición y el cortometraje -este último dirigido por Aiko Alonso, quien estuvo en la inauguración- no son obras aisladas, nos invitan a pensar las conexiones profundas entre el espacio que habitamos y el conocimiento que se produce, las calles y las aulas, y entre la experiencia de caminar una ciudad y la de transitar por la Universidad.
Carla Filipe Narciso detalló que el proyecto PAPIIT permitió reunir a numerosas mujeres, alumnas y académicas de diferentes latitudes y formaciones disciplinares en la búsqueda de una agenda común que “nos permitiera explicar los procesos diferenciales que nos inquietaban en torno a temas tan diversos como vivienda, movilidad, espacio público, planeación y diseño urbano; todo ello en un proceso de formación feminista continuo”.
Isela Cruz, encargada del guion museográfico, curaduría y productora del cortometraje, expresó: “Las mujeres hacemos falta en la academia no solo como centro de las investigaciones, sino también como agentes investigadoras y germen de cambio”. Juntas somos un recordatorio de que existimos porque resistimos.
Sandra Melissa Nava, responsable de la propuesta museográfica y la curaduría, expresó que como feminista y arquitecta “me ha quedado claro que la ausencia de las mujeres en el contenido académico, la ausencia de miradas críticas, feministas, al frente de las aulas, en la investigación, en la política pública urbana en materia de vivienda, movilidad, etcétera, ha tenido graves repercusiones en nuestro país, porque es lo que más ha hecho falta”.
—oOo—
FUENTE DE LA INFORMACIÓN: https://www.dgcs.unam.mx/boletin/bdboletin/2025_541.html
Más historias
Productores de limón se manifiestan tirando cosecha.
Trabajadores del SAT bloquean Viaducto Río de la Piedad.
Intensa jornada de La Carrera Panamericana en Guanajuato